No bebo, ni fumo, ni toco el saxo. Ni siquiera la armónica. No tengo sombrero. Mis ex-parejas nunca han tenido un piso con escalera de incendio en la parte posterior cuya ventana diera a la calle y pudiera verlas desde la acera, rodeado del humo que surge del subsuelo. Me falta la estética del desamor
Mi retina no
conserva esa sensual imagen suya a contraluz, paseando en camisón, blanco y con
transparencias, por delante de la única ventana iluminada del edifico, mientras
me apoyo en una farola con mi sombrero de ala ancha, fumando y cantando una
canción (de desamor of course) La lluvia es optativa pero queda bien y, si además la veo con otro, mejor, que eso
atormenta todavía más.
Lo reconozco, nunca he conseguido esa preciosa estética del desamor que hemos disfrutado en películas y vídeos musicales.
Jamás he tenido ese punto de locura para hacerme un tatuaje que tuviera que esconder bajo la manga y que me recordara lo desgraciado que soy por perderla. Ya sé que debe ser una mierda... ¡pero queda tan bien en las pelis!
Hemos crecido rodeados
de esas potentísimas industrias, que son el cine y la música, que nos dejan
momentos tan preciosos que uno desearía saltar dentro de la pantalla, pegarle
una patada al protagonista del videoclip o la peli, y ser "el prota" aunque esos momentos sean de lo peor que a uno le puede pasar en la vida.
Cuando he llegado a
esos momentos en la vida, y desgraciadamente ya llevo unos cuantos, siempre he
intentado la autoscopia, el viaje astral, o sea el salir de mi propio cuerpo
para verme superelegante, atormentado pero lleno de glamour paseando por
Barcelona, haciendo un largo viaje super romántico por amor... pero no acaba de
funcionar. Posiblemente porque no creo en esas cosas: yo soy más de irme
directo al cielo porque me he portado bien.
Seguramente es que
igual que los mafiosos no son gente maja como en "El Padrino" o
"Los Soprano" o tener 94 años y estar enfermo solo es bello en las
fotos en blanco y negro de magníficos fotógrafos, este glamour tan espectacular no aparece por ninguna parte.. porque no existe. El desamor tiene que ver con no tener ganas de levantarte por las mañanas, con estar de mala leche, con llantos y con insomnio
Pero prometo que la
próxima vez que me pase (venga... rollo optimista, cambio la frase por "si me vuelve a pasar") me lo voy a currar: me haré un tatoo con su nombre en chino para luego tacharlo, compraré un sombrero de ala ancha, empezaré a fumar, todo sea por la foto, e iré a apostarme en la puerta de su casa, de noche, medio borracho, para atormentarme cuando la veo llegar con otro. Y como lo del viaje astral no me sale, me compraré un palo de selfie para poder grabarme discretamente y disfrutar con lo glamouroso que he estado, por fin, en el desamor. Prometo colgarlo en facebook.
Jajaja eres lo más! Me has robado unas cuantas sonrisas 😂. Y el del Ghosting mejor me ahorro el comentario 🤐 jajaja.
ResponderEliminarMe los leeré todos!
Un besazo Dr C.
Att,
A.